Geometría polisentimental



Geometríapolisentimental” canta Alaska en mis oídos mientras atravieso la meseta de vuelta a casa, después de un fin de semana de calor y sexo, agotador. No puede pasarme ya nada más, me digo a mí misma. Aunque mientras lo pienso y lo escribo, estoy viendo sentado en diagonal (geometría polisentimental) a mí a ese chico guapísimo, demasiado joven para que me esté mirando así, para que yo le devuelva la mirada…y le sonría.
“…polisentimental, entre nosotros dos”. Recordando un abrazo de despedida, tu mano deslizándose por mi espalda, hasta llegar a la curva…se detiene y no podemos evitar un beso rápido en los labios, que se repetiría antes de despedirnos, reprimiendo las ganas de abrirnos los labios con la lengua y dejar que fluya el deseo de desnudarnos.
El chico de mi diagonal, está cada vez más interesado y no reprime su mirada, me intimida. El tren va aminorando velocidad, llegamos a Zaragoza.
A vecesno soy yo, busco un disfraz mejor”, como Vetusta Morla, no era yo quien te pedía que me acompañaras a la habitación de mi hotel. Parecía que no fuera yo quien metía la mano por tu pantalón y te apretaba el culo contra mí, para sentir tu polla dura apretando mi cuerpo.
Seríaposible conocerte más por dentro, no lo conseguiré, saber más de ti “ Love of lesbian me machaca los oídos, y a su ritmo follamos con una intensidad de locura.

La próxima estación es Barcelona Sants. No estoy segura, no sé si debería variar mi selección musical. El chico joven ya no está, o quizás no llegó a estar?


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